viernes, 27 de junio de 2008

Divertimento

Tan fuerte el viento soplaba aquel día
que a este mundo terrenal devolvió
un alma que hacia el cielo ya subía.
¡Pobre alma! En un cuerpo se metió
que por azar a la vida venía.
El golpe que en el culo recibió
le hizo saber que de nuevo vivía.
Gritó por lo triste que se sintió.
Los recuerdos ya han desaparecido
del día en que el alma libre volaba
a la vez que una mujer, con quejido,
en este mundo su cuerpo entregaba.
Pero sabe por su pecho encogido
que algo pasó cuando el viento soplaba.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué idea tan curiosa. Me gusta... porque no me recuerda a nada. Es diferente. Es auténtico. Y rima porque le apetece.